Recorro las viejas calles empedradas de la ciudad con mi desgastada bicicleta roja. Está amaneciendo y los pequeños cafés abren sus puertas. El aire huele a pan recién hecho.
Pedaleo sin rumbo, perdiéndome entre las callejuelas donde los niños corren alegres y las parejas se despiden con un fugaz beso.
Las flores que cuelgan de los balcones me saludan al pasar. Un músico ambulante me regala la melodía de su ajado acordeón. No hay un lugar mejor para dejarse llevar...
Texto: María - Árbol de Luz
Fotografía: niuniusiaa
Me han entrado ganas de subir a esa bicicleta y disfrutar de todas esas cosas ^^
ResponderEliminarBesos de letras con Tinta (^_^)
Me gusta tu bici roja *_*
ResponderEliminarMe encantaría pasear por esa calle, con el olor a pan por las mañanas y viendo amanecer... :)
ResponderEliminarMe encanta.
ResponderEliminarDan ganas de subir en esa bici roja y percibir todo lo que nos cuenta tu texto :)
Pa' Poulain.
linda foto y lindo relato.
ResponderEliminar^^
Dejarse llevar siempre es bueno pondré tu premio dentro de poco, cuando la vaguedad me deje hacer el montaje con otros que he recibido).
Serie hermoso respirar el aire de ese lugar...
ResponderEliminarBella entrada
Besos lunaticos
Dejarse llevar es una delicia y seguro que por esa calle que describes es aun mejor ^^
ResponderEliminarOhh me encanta el olor del pan recién hecho...
ResponderEliminarBonita entrada guapa ;)
Besosss
Tus palabras me han transportado a esa calle empedrada.
ResponderEliminarLa foto es estupenda :)
Un beso.
Lindisima Bici! hace años no monto una xD
ResponderEliminarLindisima Bici! hace años no monto una `^
ResponderEliminarbesos!
Me encantaría visitar esa ciudad, parece que el mundo allí gira más despacio...
ResponderEliminarQué evocador, me ha gustado mucho la imagen acompañando a las palabras ;)
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